La satisfacción de nuestros clientes es el punto de referencia en nuestra política de empresa, proporcionando una calidad consistente en los servicios prestados, cumpliendo con nuestras obligaciones contractuales y manteniendo un sistema de gestión efectivo.

Basamos nuestra política empresarial en la mejora continua del comportamiento medioambiental, ejecutando acciones de control, fomentando el reciclaje y la reutilización de los residuos.

Nos marcamos como objetivo mejorar de forma continuada la gestión de calidad y ambiental de nuestra empresa mediante una evaluación periódica de nuestro sistema de gestión y, asimismo, adquirimos el compromiso de cumplir con la legislación y normativa aplicable, tanto en materia de calidad como ambiental.

La presente política incluye los compromisos en materia de calidad y seguridad alimentaria.

Trabajamos cuidadosamente para desarrollar de forma correcta la normativa para empresas de embalajes y logística, aplicando las políticas de calidad exigidas en el sector alimentario. Nuestro objetivo principal es garantizar que los productos se rijan por los más altos estándares de seguridad y calidad.

Algunas de las políticas comunes que tenemos en consideración son:

Cumplimiento normativo: cumplimos con todas las normativas y regulaciones pertinentes, establecidas por las autoridades sanitarias y de seguridad alimentaria.

Control de calidad: establecemos controles de calidad para garantizar que los embalajes cumplan con los estándares requeridos por los clientes y las normativas aplicables. Esto implica llevar a cabo pruebas y ensayos periódicos para asegurar que nuestros embalajes sean seguros para el contacto con los alimentos.

Seguridad alimentaria: implementamos medidas para prevenir la contaminación de los alimentos y asegurarse de que nuestros embalajes no afecten la calidad o integridad de los productos. Entre las medidas, destacan las prácticas de higiene estrictas en los procesos de fabricación y almacenamiento.

Innovación y mejora continua: constantemente buscamos mejorar nuestros productos y procesos. Esto implica invertir en investigación y desarrollo para identificar nuevas tecnologías y materiales que puedan mejorar la calidad y la seguridad de los embalajes.

Trabajo en equipo: sabemos que la calidad en el sector alimentario es un esfuerzo colectivo que involucra a diferentes departamentos de la empresa: producción, calidad, logística y comercialización. Es importante establecer una comunicación efectiva y trabajar en equipo para garantizar que todos los elementos de la cadena se alineen y se cumplan con los estándares de calidad establecidos.

Capacitación y formación: resulta fundamental formar al personal de la empresa en cuanto a las políticas y procedimientos de calidad, así como en temas de seguridad alimentaria. Esto asegurará que todo el personal tenga el conocimiento y las habilidades necesarias para llevar a cabo sus tareas de manera segura y en conformidad con las políticas establecidas.